Lo que aprendí.

Me enseñaste muchas cosas,

tantas cosas,

 que no sé ya ni qué aprendí

Me impulsaste a hacer cosas que no he hecho por nadie,

a escuchar cosas que jamás había escuchado,

a ver cosas que jamás había visto,

a soñar cosas que jamás había soñado,

a leer cosas que jamás habría querido leer.

Me enseñaste a que cualquier película es buena

si la ves junto a ciertas personas.

Me enseñaste que un libro es mejor

si te lo prestan.

Me enseñaste que escribir en un papel es mucho más bonito

si te lo escribe una persona que quieres.

Lo último que me enseñaste 

fue a no creer todas las palabras

que salen de unos labios bonitos;

que las palabras se las lleva el aire;

que los libros se queman;

que las películas y las canciones se terminan;

que una amistad no siempre es duradera;

que ni las personas que cambian tu mundo

son eternas.